Problemas de Geografía Personal

sábado, noviembre 05, 2011

Muerte de una estrella




Un solo átomo de hierro.

No hay regreso una vez traspasado
ese horizonte.
El astro fabrica, en su interior,
su único veneno
en un intento voraz por respirar.

No existe antídoto.

El microscópico mineral crece y,
en segundos,
desencadena la muerte de la estrella.